Sigo sin ser nacionalista.
Las cosas de la sangre y el alma no se deciden, se sienten o no. Y los sentimientos de verdad se cocinan a fuego muy lento. Aunque eso para nada significa que mañana no vote una opción por el Si.
Pero a todos esos que no les cabe en la cabeza que millones de personas puedan votar mañana a Junts pel si o la Cup, les diría que a muchos no nos cabe en la cabeza -y soy un cabezón- que la mitad de un pais vote al PP.
Y le vuelva a votar. Y le siga votando. Y a pesar de todo lo que pasa y ha pasado, las encuestas dicen que les seguirán votando. No les votarán tanto, pero demasiado.
Luego, ellos y los que les votan, se permiten llamar nazis a los catalanes, mientras siguen respetando la memoria de un dictador fascista, asesino, inculto y ridículo. Otra verguenza mundial.
A mi Artur Más me cae como el culo, pero comparado con el generalísimo, en unidades de nazismo, es un boy scout.
De lo que si estoy seguro es que de la Alemania nazi hubiese preferido no sentirme parte y de la Hungría de hoy, tampoco. Y tanto Hitler como Viktor Orbán, salieron de las urnas.
Mañana habrá cientos de miles de votantes por el SI, a los que la estelada y els segadors no les ha puesto la piel de gallina jamás. Votarán hartos de que les insulten, de que les importe un rábano lo que ellos sientan, de que les prohíban expresarse en un referéndum –democracia en la que votar es ilegal-. Hartos de que les mientas, hartos de que la última respuesta sea siempre una Constitución, que se puede cambiar para que reine una mujer y no para que se trate con dignidad a un pueblo. Hartos de contemplar impotentes como un país que en el 2.000 estaba en el 2.000, vuelve a estar en 1.977 y bajando.
No solo no creo en banderas, fronteras y naciones, soy peor aún, tampoco creo en la sangre. Si tu padre es un maltratador o tu hermano es un chorizo, lo son y punto. Compartir tu ADN no les quita ni un ápice de culpa. Es fácil adivinar lo que me pasa con los vecinos o los paisanos. Amo a catalanes, andaluces, gallegos, valencianos, alemanes, franceses, italianos, montón de argentinos, una danesa, una belga y dos holandesas. Me siento más cerca de cualquiera de ellos que de Rajoyhttps://youtu.be/QwQqY7FKW_M, Pedro Sanchez o Artur Más.
De casa de tus padres tienes que irte porque es ley de vida. Del resto de tus casas tienes que irte cuando la convivencia se vuelve insoportable y no hay dialogo posible. Por mucho que quieras a quién dejas. El amor es imprescindible, pero no siempre es suficiente.
No me convenceréis. Catalunya no era independentista hace 10 años, no le era ni Artur Más y no creo que lo sea ahora. Mañana el si, en realidad es un “basta ya”.
Por cierto, pretender que los millones de catalanes que mañana votarán Si, son idiotas manipulados, no es más que otro motivo para votar Si.
El spot de ayer, el de la cupula corrupta del PP hablando en polaco, es otro. https://youtu.be/QwQqY7FKW_M